Article 4EQN8 Una de las pediatras que atendió a niños inmigrantes describe un patrón de brechas en la atención médica proporcionada en los albergues

Una de las pediatras que atendió a niños inmigrantes describe un patrón de brechas en la atención médica proporcionada en los albergues

by
por Michael Grabell
from Articles and Investigations - ProPublica on (#4EQN8)

por Michael Grabell

En un hogar grupal deteriorado y pintado de verde, en el sur de Nueva Jersey, Yosary se debilitaba cada vez mis. Se sentia cansada todo el tiempo, y, a veces, al levantarse por las mananas, se mareaba tanto que tenia que volverse a acostar. Luego le comenzaron a salir moretones por todo el cuerpo. Se le antojaba el hielo, el cual se comia a mordidas cada vez que lograba obtener un vaso lleno de cubitos.

Durante meses esta chica delgada de 15 anos de edad que habia huido de Honduras con su pequeno de dos anos, informaba al personal del albergue acerca de sus sintomas. Pero ellos no tomaron en serio sus siplicas de ayuda, dicii(C)ndole que se mareaba por haberse puesto de pie ripidamente. Y los moretones? Probablemente se habia golpeado con algo y no se acordaba. Masticar hielo era un mal hibito que tendria que romper.

Cuando por la llevaron a una de las pediatras del albergue el pasado verano, Yosary estaba en un estado tan grave que tuvieron que internarla en un hospital de la localidad y conectarle infusiones intravenosas. La pediatra, Elana Levites-Agababa, reconocio los signos obvios de una anemia grave que podria haberle provocado hasta insuficiencia cardiaca y danos a otros organos, si no se hubiese tratado. El personal deberia haber sabido lo que estaba sucediendo, ya que los antecedentes de anemia de la adolescente estaban documentados en el expediente del albergue.

"Me senti devastada por la atencion que recibio", comento Levites-Agababa. "Es muy probable que se hubiera podido prevenir su hospitalizacion si la hubieran traido cuando comenzo a indicar que necesitaba ver a un mi(C)dico".

Manti(C)nte informado/a

Suscribete a nuestra newsletter en espanol y te avisaremos cada vez que publiquemos una historia en espanol.

Levites-Agababa, pediatra de CAMcare, considero que ese fue otro lapso alarmante. Durante meses ella habia notado la actitud de descuido en cuanto a las necesidades mi(C)dicas de los ninos de los albergues para menores inmigrantes sufragados por el gobierno federal y administrados por el Centro para Servicios Familiares (Center for Family Services - CFS), organizacion sin fines de lucro basada en Camden, Nueva Jersey. Fue por eso que decidio revisar los expedientes de los noventa pacientes del CFS que habian sido atendidos en el centro de salud comunitaria.

Comento, por ejemplo, que los menores, que incluyeron bebi(C)s, habian acudido al mismo hasta diez semanas tarde para ser vacunados, lo cual aumento sus riesgos de contraer enfermedades infecciosas. Hubo una serie inusual de faltas a consultas y cancelaciones, aunque casi todas clinicas del centro de salud se encuentran a menos de media hora de los albergues. Y comenzo a ser rutina que estos no programaran las consultas de seguimiento ordenadas despui(C)s de una visita a la sala de emergencias, hospitalizacion o admision a instituciones psiquiitricas.

La doctora informo sus hallazgos a CAMcare, organizacion contratada por CFS para brindar atencion mi(C)dica a menores inmigrantes, muchos de ellos en Estados Unidos por haber cruzado la frontera con Mi(C)xico para pedir asilo. Sin embargo, y conforme pasaron los meses sin que mejorara la situacion, Levites-Agababa comenzo a inquietarse ain mis y presento quejas a principios de este ano ante la Oficina Federal de Reasentamiento de Refugiados y las autoridades de Nueva Jersey, ambas entidades encargadas de reglamentar por separado los albergues de ese estado.

Mientras que esperaba respuesta, Levites-Agababa dijo que el consultorio mi(C)dico recibio una solicitud nueva y preocupante: CFS queria autorizacion mi(C)dica para restringir fisicamente a los menores bajo su cuidado.

"No se sienten obligados a proporcionar atencion adecuada para estos ninos ni a seguir ninguna recomendacion dictada por un proveedor de atencion mi(C)dica", dijo Levites-Agababa, quien ha trabajado en CAMcare desde 2015. "Y eso lo han demostrado una y otra vez al grado de que es algo que interfiere con nuestra capacidad para practicar la medicina".

CFS nego haber hecho nada mal, ademis de rehusarse a contestar preguntas especificas.

"El objetivo principal del programa es la seguridad y el bienestar de todos los ninos bajo nuestro cuidado", dijo por correo electronico Eileen Henderson, Directora de Operaciones. "CFS sigue trabajando con la Oficina de Reasentamiento de Refugiados y nuestros proveedores de atencion mi(C)dica, con el fin de asegurar que los ninos reciban el tratamiento mi(C)dico adecuado de acuerdo con las instrucciones que recibimos de la misma (ORR)."

El cuidado de los menores inmigrantes custodiados por los EE. UU. durante el ano pasado, ha sido escudrinado intensamente en vista de los miles de alegatos de abuso sexual y los reportajes sobre el enriquecimiento de algunas instituciones sin fines de lucro; cosas que han ventilado dudas acerca de la capacidad del gobierno federal para monitorear su red de aproximadamente cien albergues.

Ahora, una nueva oleada de familias y menores no acompanados en la frontera esti retando al sistema de manera nunca vista. El Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE.UU. ya tenia dificultades para encontrar lugares nuevos donde hospedar a ninos inmigrantes cuando las politicas de la administracion del Presidente Donald Trump hicieron que hubiera mis ninos detenidos por mis tiempo. Con el despido reciente de los funcionarios principales de inmigracion del Presidente, se espera que Trump establezca politicas ain mis severas y hasta un esfuerzo mis activo para separar a menores de sus familias.

A finales de febrero habia 13,500 ninos en albergues, cinco y pico veces mis que hace dos anos. El pasado mii(C)rcoles Trump solicito fondos adicionales del Congreso para casi duplicar el cupo de camas.

La atencion mi(C)dica de estos recii(C)n llegados se convirtio en punto de enfoque el pasado diciembre, cuando dos pequenos enfermos murieron estando bajo la custodia de la Oficina de Aduanas y Proteccion Fronteriza cerca de la frontera. Sin embargo, y a diferencia de esos ninos, Yosary (quien pidio que solo se usara su primer nombre), fue desarrollando sus sintomas mucho despui(C)s de haber cruzado al pais. Ella y otros menores revisados por Levites-Agababa se encontraban en un lugar supuestamente seguro, bajo el cuidado de personal capacitado para atender a menores y a reconocer sintomas de salud bajo supervision de agencias federales y estatales a cargo de servicios mi(C)dicos y sociales.

La ORR declino nuestra solicitud para entrevistar a su personal mi(C)dico. La agencia dijo que, despui(C)s de investigar la queja presentada por Levites-Agababa, habia suspendido provisionalmente la recepcion de ninos de parte del CFS hasta que se abordaran los problemas. No mencionaron cuindo entro en efecto la suspension, cuinto tiempo duro, o lo que CFS hizo para resolver las problemiticas.

La ORR tampoco menciono cuintas quejas habia recibido relacionadas con la atencion mi(C)dica, aunque si dijo que "los mi(C)dicos y las enfermeras que tienen inquietudes relativas a la salud, a menudo se comunican" con su personal para plantearlas y resolverlas.

20190503-medical-care-immigration-shelteEl ano pasado Yosary huyo de Honduras con su hijo de dos anos despui(C)s de recibir amenazas y por temer ser secuestrada. (Tamika Moore para ProPublica)

Los lapsos documentados por Levites-Agababa plantean preguntas criticas acerca del rompecabezas de reglamentos estatales de los cuales depende la ORR para monitorear los albergues, mismos que van desde hogares colectivos pequenos, hasta instalaciones con dos mil camas ubicadas en poblados pequenos y localidades remotas. El pasado martes un chico de 16 anos murio poco despui(C)s de llegar a un albergue de la ORR en Texas.

Las preocupaciones de Levites-Agababa fueron substanciadas recientemente por las autoridades regentes de Nueva Jersey quienes encontraron fallas numerosas en la atencion de ninos inmigrantes proporcionada por CFS. Aun con las faltas de cumplimiento, la agencia estatal no tiene capacidad para imponerle multas al operador del albergue ni para retirarle a los menores bajo su cuidado.

Levites-Agababa comento que teme que podria ser despedida por hablar del tema, pero que acepto hacerlo piblicamente con la esperanza de enfocar algo de atencion hacia el cuidado de estos menores en los albergues.

CAMcare no devolvio nuestras llamadas con las que pedimos comentarios.

En virtud de que queda estrictamente limitado obtener expedientes mi(C)dicos de estos menores, tambii(C)n resulta dificil saber si los problemas que informo Levites-Agababa son inicos o mis bien emblemiticos de problemiticas mis extensas. En una evaluacion hecha el ano pasado acerca del Centro de Detencion Juvenil del Condado de Yolo en California, se encontraron problemas similares con el acceso a atencion mi(C)dica de parte de los adolescentes inmigrantes, los cuales incluyeron "falta de seguimiento de lesiones graves" y largas esperas para atender urgencias mi(C)dicas.

La inquietud relacionada con estos lapsos ha hecho que el Inspector General del HHS lleve a cabo una revision nacional de la atencion mi(C)dica y de salud mental que se esti proporcionando en los albergues de menores.

La Academia Americana de Pediatria declaro una seria preocupacion acerca de las consecuencias de salud mental relacionadas con detener a menores, resaltando que aun los periodos cortos pueden ocasionar traumas psicologicos y grabar consecuencias de por vida. La AAP no considera que los albergues sean un tipo de detencion y el enunciado sobre sus politicas no plantea el impacto de una estadia de largo plazo en albergues de la ORR. Los albergues fueron disenados como alternativas basadas en la comunidad en lugar de reclusorios, aunque actualmente los menores permanecen en estos durante mis tiempo.

Levites-Agababa dijo que su experiencia ha hecho que crea que los pediatras deben adoptar una postura mis firme, comparindolos con la i(C)poca en la que los mi(C)dicos se rehusaron a dar inyecciones letales cuando decidieron que su papel para aliviar el sufrimiento tenia mis peso que el dano ocasionado por asistir en la ejecucion de un reo. Levites-Agababa agrego que tambii(C)n considera que brindar atencion mi(C)dica a menores inmigrantes no sobrepasa los efectos traumiticos de estar detenido en un albergue.

"Nos estin utilizando como sello oficial mi(C)dico para justificar el mantenerlos detenidos", dijo. "Y, cuando participamos sin objetar, permitimos que continie la detencion de miles y miles de ninos y ninas".

Los encargados de monitorear el cuidado de menores inmigrantes en los albergues, y la eficacia de esa supervision, dependen mucho de los lugares donde terminen estos ninos.

Todos los albergues deben seguir las reglas de la ORR, pero la agencia depende bastante de los estados cuando se trata de otorgar licencias a las instituciones y garantizar la seguridad de los menores. Por ende existe un conjunto desorganizado de normas.

En Texas, los albergues se consideran centros residenciales de cuidado de menores y deben seguir reglamentos estrictos establecidos por funcionarios de bienestar infantil. En Arizona, los albergues se consideran instituciones de salud mental, con un conjunto mis limitado de reglas que obstruyen las inspecciones del estado.

En Nueva Jersey, los funcionarios de bienestar infantil que normalmente supervisan instalaciones con ninos, estin impedidos por la ley para inspeccionar los albergues de menores inmigrantes en virtud de que estos no son sufragados por el estado, dijo Tammori Petty, vocera del Departamento de Asuntos Comunitarios de Nueva Jersey.

En su lugar, las instalaciones de la ORR tienen licencia para operar como albergues de emergencia para indigentes y son inspeccionados por la Oficina de Normas de Alojamiento Provisional del Departamento. Las reglas permiten que los ninos vivan en los albergues siempre y cuando sean parte de una familia. En el caso de los ninos inmigrantes, dijo Petty, el departamento decidio que la ORR califico debido a que ofrece cuidado bajo custodia para menores.

La restriccion burocritica presenta una yuxtaposicion interesante. Los albergues del CFS para menores inmigrantes, los cuales no pueden ser supervisados por funcionarios de bienestar infantil, se conocen como el Programa "Juntos", asi en espanol. Para contrastar, el programa del centro para atender crisis de adolescentes estadounidenses, llamado simplemente albergue Together (juntos en ingli(C)s), queda reglamentado por la agencia estatal de bienestar infantil.

"Me preocupa la falta de supervision estatal; el hecho de que estos albergues no reciban licencia de cualquier organismo estatal dedicado a supervisar el cuidado infantil", dijo Farrin Anello, abogado principal de la American Civil Liberties Union (Union Americana de los Derechos Civiles) de Nueva Jersey.

De conformidad con un acuerdo emitido por un tribunal federal, los albergues tienen el requisito de proporcionar atencion mi(C)dica de rutina y servicios de emergencia que incluyan chequeos mi(C)dicos, vacunas y pruebas de deteccion de enfermedades infecciosas dentro de un periodo de 48 horas posteriores a la admision.

Las normas de la ORR tambii(C)n exigen que el personal de los mismos observe a los ninos para detectar senales de enfermedad y que reaccionen a peticiones de atencion mi(C)dica regulares (no de emergencia) dentro de 24 a 48 horas. Los albergues deben notificar a la ORR acerca de una visita a la sala de emergencias dentro de las siguientes cuatro horas, ademis de revisar las instrucciones de dada de alta y seguir las recomendaciones de tratamiento giradas por los mi(C)dicos.

No obstante, y aunque la ORR tenga poder para retirar a los menores de los albergues y recortar fondos, tambii(C)n carece desesperadamente de plazas y cualquier reduccion de cupo crearia una crisis. Quienes abogan por los ninos han dicho que estas prioridades conflictivas son el motivo por el cual es importante la supervision.

La atencion que se brinda en los albergues se ha hecho cada vez mis critica conforme evoluciona su funcion. Originalmente, estos se vieron como estaciones provisionales donde se alojarian los menores mientras el gobierno ubicara y verificara a los familiares que los cuidarian mientras se evaluaran sus casos de asilo. Sin embargo, el otono pasado ya durante la administracion de Trump, el promedio de la estadia subio a tres meses.

Los albergues de Nueva Jersey habian existido casi sin conocerse aun cuando la crisis de separacion de familias del verano pasado enfoco la atencion del piblico en la red de instalaciones gubernamentales que ha recibido $5 miles de millones de dolares desde que comenzo a aumentar la cantidad de ninas y ninos no acompanados que entraron al pais a partir de 2014.

CFS, dedicado a proporcionar servicios sociales en Camden y el sur de Nueva Jersey durante casi cien anos, abrio su primer albergue para menores no acompanados en 2017. Desde esa fecha ha recibido casi $11 millones de dolares en fondos federales. Un hogar grupal en la parte trasera de una iglesia en Burlington acoge a veinte menores de 13 a 17 anos de edad. Otro en Woodbury fue asignado para un grupo de hasta diez madres adolescentes que cruzaron la frontera con sus hijos. El programa recibio autorizacion reciente para abrir un tercer albergue cerca de Atlantic City este ano.

Una evaluacion de los archivos de inspecciones muestra que antes de la queja presentada por Levites-Agababa, la Oficina de Normas de Alojamiento y Vivienda Provisional habia emitido infracciones por faltas menores de cumplimiento en los albergues; cosas como un inodoro suelto, una ducha que necesitaba compostura, recordatorios para llevar a cabo ensayos mensuales de evacuacion para casos de emergencias. En una ocasion durante el otono, tambii(C)n emitio una infraccion para el CFS por operar su albergue en Burlington con una licencia y un certificado de incendios vencidos. Sin embargo, el Departamento de Asuntos Comunitarios menciono posteriormente que, bisicamente, la oficina no habia enviado la licencia a tiempo para la inspeccion.

Las reglas de Nueva Jersey que rigen los albergues de emergencia para indigentes contienen poco en relacion con el bienestar infantil. Los albergues deben ofrecer tres comidas diarias, expedir recomendaciones para atencion mi(C)dica de los residentes, informar acerca del abuso de menores al Departamento de Menores y Familias, y contar con una "cantidad suficiente" pero no identificada "de personal competente" en las instalaciones, para supervisarlas.

Los informes de policia obtenidos por ProPublica muestran pocos incidentes que atraerian el escrutinio tipico de los encargados del cumplimiento. En noviembre, un chico de 16 anos huyo del albergue de Burlington. Y, el pasado abril, la policia acudio a revisar un informe relacionado con un varon del personal que habia hecho comentarios indebidos y tocado a una chica durante una evaluacion realizada a puerta cerrada.

En otros estados, incidentes similares han dado lugar a infracciones por no supervisar bien a los menores y no mantener limites adecuados. Pero los informes de las inspecciones en Nueva Jersey no mencionan ninguno de este tipo de incidentes ni tampoco los problemas mi(C)dicos. Los funcionarios del Departamento de Asuntos Comunitarios insisten que nunca recibieron la queja de la Dra. Levites-Agababa. Pero, despui(C)s de que el Departamento de Menores y Familias emitiera una recomendacion por negligencia mi(C)dica sobre la cual ella misma habia presentado una queja, ademis de varias llamadas de ProPublica, un inspector finalmente visito el albergue a finales de marzo, para encontrar una cantidad de faltas.

CFS no habia cumplido con garantizar que el personal recibiera capacitacion adecuada para monitorear cambios de conducta entre los residentes, concluyo el inspector. Tampoco habia cuidado que el personal entendiera como tratar las emergencias. Fallo en tramitar atencion mi(C)dica cuando uno de los residentes desarrollo un padecimiento que requeria atencion. No investigo ni llevo archivos relacionados con casos en los que menores fueron puestos en peligro. Ni tampoco informo a la agencia estatal de bienestar infantil acerca de abuso y maltrato de menores.

El informe indico que las "instalaciones deben tener cuidado al manejar y documentar las emergencias, lo cual incluye enviar a los residentes a obtener atencion mi(C)dica u otro servicio de emergencia y documentar archivos acerca de necesidades mi(C)dicas especiales o padecimientos, los regimenes recetados que habria que seguir, y los nimeros telefonicos de los mi(C)dicos a contactar" en casos de emergencia.

El Departamento de Asuntos Comunitarios dijo posteriormente que, en efecto, CFS habia presentado el informe del abuso del menor y que atribuyo la falta de seguimiento a una confusion con el papeleo en la oficina.

Aun asi, mientras que la oficina autorizara el plan de CFS para componer las faltas de cumplimiento, no cuenta con muchas opciones adicionales. La inica herramienta que tiene a su disposicion para hacerlas cumplir es revocar la licencia de los albergues, cosa que no planea hacer.

Cuil es la consecuencia de eso? De conformidad con las leyes de Nueva Jersey, en vez de estar reglamentados como albergues para indigentes, las instalaciones serian regidas como hoteles. Las leyes estatales para hoteles no tienen reglas relacionadas con el cuidado de menores.

Despui(C)s de entrar al Hospital de Cooper University en Camden, Yosary recibio la primera de lo que serian varias infusiones de hierro. Encamada en el hospital, separada de su bebi(C) y lejos de otros familiares que tambii(C)n huyeron de Honduras, Yosary pensaba en su madre quien murio de cincer cuando ella era muy pequena.

"Tenia mucho miedo", recuerda. "Pensi(C) que no me queria morir".

Yosary se vino a los Estados Unidos el pasado marzo buscando asilo. En Honduras, dijo que la habian violado cuando tenia doce anos, quedando embarazada de su hijo. Cuando su familia denuncio el ataque, agrego, comenzaron a recibir una serie de amenazas. En su ciudad, las lineas entre la pandilla local, la policia y las fuerzas militares se borraban cada vez mis.

Conforme crecia su nino, Yosary dijo que su atacante comenzo a merodear por su casa y ella temio que fuera a secuestrarlo.

Fue entonces que Yosary decidio huir con varios miembros de su familia, marchando a pie con su bebi(C) a cuestas, luego en camion y, finalmente en una lancha inflable con la cual atraveso el Rio Bravo. Cuando encontro a los agentes de la Patrulla Fronteriza la llevaron a un puesto de procesamiento donde la separaron del resto de su familia para ser enviada con su hijo al hogar de madres y bebi(C)s del CFS de Nueva Jersey.

Dijo que los primeros meses se sintio bien, pero que a finales de la primavera comenzo a sentirse mareada y somnolienta todo el tiempo y a notar que le salian moretones en los brazos y las piernas.

"Les dije varias veces", comento. "Pero no me tomaron en serio".

Yosary comenzo a sentirse atrapada en el albergue, donde solo habia tres otras chicas junto con sus bebi(C)s, dijo. Era raro que les permitieran salir del lugar, ni siquiera a respirar aire fresco. Su inica conexion con el mundo exterior eran dos llamadas breves semanales con miembros de su familia que se encontraban en la misma situacion precaria de inmigracion.

Por fin, en algin se llevo a cabo una junta en el hogar que incluyo personal de fuera. Yosary les comento acerca de los moretones, pero aun en el consultorio mi(C)dico y en el hospital, agrego, CFS no le permitio hablar con la doctora a solas. "Siempre habia alguien alli conmigo" dijo.

20190503-medical-care-immigration-shelteYosary dijo que se sentia atrapada en uno de los albergues para menores inmigrantes de Nueva Jersey. Dijo tambii(C)n que habia informado sobre sus sintomas de anemia grave durante meses, pero que el personal no habia tomado en cuenta sus llamados de ayuda. (Tamika Moore para ProPublica)

Levites-Agababa dijo que ese era un problema recurrente con los pacientes del programa, y que le preocupaba que hiciera que los ninos temieran hablar acerca del cuidado que recibian en el albergue.

"Cuando insisti que los chaperones salieran del consultorio para que yo hablara con los ninos a solas, se rehusaban a salir e insistieron que esa era la politica", menciono.

Yosary fue dada de alta varios dias despui(C)s con instrucciones de que obtuviera otro tratamiento intravenoso. Pero CFS no informo a CAMcare acerca del mismo, segin la queja de Levites-Agababa.

Levites-Agababa anadio que comenzo a ser rutina que no se programaran consultas de seguimiento, ni se siguieran las recomendaciones de ir a un especialista u obtener radiografias o anilisis de laboratorio. La doctora tambii(C)n indago con CFS acerca de estos lapsos.

Dijo que al principio el personal le informaba que la ORR no aprobaria los tratamientos, pero que luego se entero que CFS ni siquiera habia presentado las ordenes mi(C)dicas.

Una enfermera de CAMcare, quien pidio que no se identificara su nombre, repitio las inquietudes de Levites-Agababa. "Hubo muchas consultas que negaron, o a las que faltaron", menciono. Otro mi(C)dico de CAMcare dijo que sabia acerca de los problemas pero que no tenia suficiente informacion para hablar de ellos.

En algunos casos, agrego Levites-Agababa, las madres de los bebi(C)s traian los registros de vacunas de sus paises de origen, pero que el personal de los albergues no llevaron los documentos al examen mi(C)dico inicial.

"Esta pobre madre adolescente viajo atravesando varios paises con todo tipo de peligros y contratiempos, y protegio el documento de las vacunas al igual que a su nino", dijo, "y ni siquiera lo traen a la consulta?"

Yosary, ya instalada en Alabama con su hermana mayor, dijo que no podia olvidar los cinco meses que paso en el albergue y que queria levantar su voz para ayudar a las demis chicas en ese lugar.

"Espero que no les pase como a mi" dijo con el pequeno de cabello rizado en su regazo, "porque fue horrible estar encerrada en ese lugar".

Agrego que incluso hasta ahora recuerda la falta de interi(C)s por su bienestar. De acuerdo con las reglas de la ORR, cuando se da de alta a una menor no acompanada los albergues deben entregarles una copia de su historial mi(C)dico.

La hermana de Yosary, quien no quiso que se usara su nombre para proteger a su familia, saco un sobre grande de papel manila con los registros de Yosary y su nino. Aunque hay piginas bien impresas, una tras otra resulta ilegible.

20190503-medical-care-immigration-shelteSe supone que los albergues deben entregarles a los menores no acompanados una copia de su historial mi(C)dico. Pero muchas de las piginas del expediente que el albergue le entrego a la familia de Yosary son ilegibles porque la impresora se quedo sin tinta. (Michael Grabell/ProPublica)

"Me dijeron que estos son los papeles de la escuela, del hospital, de todo", dijo Yosary. Pero aparentemente la impresora se quedo sin tinta. "Ni siquiera se puede leer", agrego. "Uno de los papeles hasta esti en blanco".

En Nueva Jersey, Levites-Agababa dijo que se preocupa de lo "que esti sucediendo sistemiticamente en este y en un sinfin de hogares en todo Estados Unidos" y se pregunta si otros mi(C)dicos serin lo suficientemente atrevidos para quejarse. "Realmente no se quien mis podria sacar a relucir esta inquietud ante el piblico o la ORR".

Yosary y su hermana dijeron estar contentas de que Levites-Agababa decidiera alzar su voz.

"Nadie del albergue va a denunciar nada", dijo la hermana de Yosary, quien tambii(C)n estuvo en un albergue federal para menores cuando llego.

"Yo no lo hubiera hecho porque yo aqui soy inmigrante", dijo Yosary.

"Y", anadio su hermana, "ella no conoce las reglas o las leyes".

11334247.gif
External Content
Source RSS or Atom Feed
Feed Location http://feeds.propublica.org/propublica/main
Feed Title Articles and Investigations - ProPublica
Feed Link https://www.propublica.org/feeds/main
Feed Copyright Copyright 2024 Pro Publica Inc.
Reply 0 comments